top of page
  • Sebastián Carvajal y Andrea Cano /

INCERTIDUMBRES MARCAN LA RUTA DE LOS PRÓXIMOS CUATRO AÑOS EN ANTIOQUIA

Analizamos el plan de desarrollo departamental “Unidos por la vida 2020-2023”, aprobado en mayo pasado por la Asamblea de Antioquia, desde que en junio pasado y en medio de la pandemia Luis Fernando Suárez asumiera el encargo como gobernador, tras la medida de aseguramiento contra el electo Aníbal Gaviria. En medio de estas situaciones, ¿cuál es el plan que se mantiene para el departamento? ¿Cómo se financiará?


Por: Sebastián Carvajal y Andrea Cano


Este año se aprobó un plan de desarrollo departamental atípico. Su construcción pasó de ser descentralizada en las subregiones a virtual, en medio de la emergencia sanitaria por COVID-19 y, antes de ser presentando ante la Asamblea Departamental, tuvo que ajustarse a los retos que conllevaba la crisis de salud y la reactivación económica. Luego, el ente legislativo lo discutió mediante sesiones no presenciales y lo aprobó con 25 votos a favor y uno en contra.


Ahora el Plan guiará al gobierno departamental durante los próximos cuatro años, bajo el objetivo de “trabajar unidos por una nueva visión departamental, cuyo centro sea el ser humano y su desarrollo integral y sostenible”.


“Tenemos dos propósitos superiores en el plan que son la vida y la equidad y por eso muchas de las estrategias y programas van a ir al cierre de brechas”, explicó Claudia García, directora de Planeación departamental y quien coordinó la construcción y aprobación del documento.


El Plan de Desarrollo contempla cinco enfoques estratégicos que son transversales: Arriba Antioquia -un programa para la reactivación pospandemia-, Emergencia Climática, Transformación Digital de Antioquia, Antioquia Resiliente y los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET).


Por su parte, Nuestra Gente, Nuestra Economía, Nuestro Planeta, Nuestra Vida y Nuestra Gobernanza, son las cinco líneas estratégicas que hacen parte del plan y que se desglosan en 32 componentes y 166 programas.


Además, estipula un plan de inversiones por cerca de 18,9 billones de pesos en el cual se relaciona el plan cuatrienal, que son recursos propios del departamento y que alcanzan los $10,63 billones, más $8,3 billones que provienen de fuentes alternativas. Se llaman así porque no hacen parte de las rentas tradicionales y resultan claves ante la disminución de ingresos corrientes de libre destinación, a causa de la emergencia sanitaria.


“Tenemos varias fuentes alternativas: uno es el Sistema General de Regalías, que es una apuesta muy ambiciosa por presentar buenos proyectos; los recursos de crédito, que durante la discusión en la Asamblea tuvimos las disposiciones que nos permitían mayor espacio fiscal para apostar por ellos. Otra fuente es el capital de la solidaridad, la pandemia ha sido un ejemplo de cómo se puede movilizar recursos en especie y hay otros mecanismos como las obras por impuestos y la cooperación internacional”, aseveró García.


Con respecto a los recursos de crédito, la directora de Planeación departamental agregó que la Gobernación está trabajando en dos frentes: uno es el reperfilamiento de la deuda; es decir, obtener mejores periodos de gracia o mejores tasas de interés, y el segundo es buscar las opciones más competitivas para el endeudamiento, ya sea con la banca local o multilateral. “Lo que se está haciendo es explorar las mejores condiciones del mercado”, explicó la servidora.


Aunque por ahora el panorama financiero no está del todo claro para la Gobernación. “Todavía no sabemos los impactos en términos fiscales del COVID-19 y eso tiene dos elementos: uno es el recaudo propio y sus negocios, cómo se ven afectados. Creo que habrá mucha más evasión y también quisiera saber qué impacto tendrá sobre la FLA el cierre de locales comerciales. Lo segundo es lo que la Nación va a dejar de girarle al departamento. Eso es una cosa todavía incierta”, señaló Juan Esteban Lopera, profesor del Instituto de Estudios Políticos de la Universidad de Antioquia.


Gobernación mediadora, ese es el plan


Para entender el plan de desarrollo de Antioquia es importante tener claro que el Departamento tiene dos funciones claves: ejecutar recursos y servir de intermediador entre lo local y lo nacional.

Es decir, además de diseñar e implementar programas con capital propio, “se encarga de coordinar las acciones con las entidades de orden nacional o con los municipios, de tramitar las exigencias y demandas de unos y otros y de apoyar, acompañar y prestar asistencia técnica a las localidades”, explicó Lopera.


Por esta razón se explica que las fuentes alternativas correspondan al 44% del total de las inversiones de Plan de Desarrollo, lo que además pone a prueba su capacidad de articularse con otras agendas, como lo explica Juan Sebastián Aristizábal, director del Centro de Análisis Político de la Universidad Eafit: “Uno lo que evidencia es un esfuerzo por articular distintas agendas, agendas globales, como los Objetivos de Desarrollo Sostenible, con agendas nacionales como los Conpes y con unos enfoques muy definidos que me parecen interesantes”, dijo.


La financiación de los programas y proyectos, la gran pregunta sobre el plan departamental.

Infografía: Sebastián Carvajal y Andrea Cano Gaviria.


Relevo al timón en medio de la tormenta


Al indagar sobre las apuestas y lo que se puede esperar del Plan de Desarrollo, Aristizábal señaló que: “es lo suficientemente ambicioso para tratar de recoger las discusiones que están sobre la mesa. No creo que le falte, el reto ahí es poder materializar todo lo que se está proponiendo en ese plan de desarrollo que fue aprobado”.


De igual forma, destacó que hay un esfuerzo importante por articular dinámicas políticas, económicas y sociales para tratar de atender de forma oportuna cada una de las subregiones del departamento y aseguró que con la finalización de los corredores viales habrá una mejor conexión para desarrollar el Nordeste, Occidente y Urabá antioqueños.


Sobre el impacto de la pandemia en las subregiones indicó que sus efectos se verían a lo largo del segundo semestre, especialmente en lo económico y social y valoró el esfuerzo del programa Arriba Antioquia por reconocer esas dificultades y proponer soluciones desde la articulación institucional.


Para Lopera la aprobación es apenas el inicio, “el partidor” de una serie de dinámicas políticas para ejecutar su implementación. “Ningún plan de desarrollo se cumple al 100 % y esas son dinámicas políticas, porque lo técnico ya se resolvió. Es muy difícil gestionar la burocracia de la Gobernación, son elementos muy complejos. El plan define una cantidad impresionante de equipos de trabajo que existen en la medida en que existen programas para ejecutarse y se les asigna un recurso”, apuntó el académico.


Acerca de los retos políticos que tiene la gestión del plan, Lopera indicó que son varios, entre ellos, la detención de Aníbal Gaviria, las alcaldías y sus propias apuestas; la paz, los PDET (Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial, estrategia asociada al cumplimiento de los acuerdos de paz) y el respaldo que estos tengan por parte de la Nación; además de las dinámicas territoriales marcadas por los grupos de incidencia, legales e ilegales.


Los lugares de la oposición


Sobre la discusión y aprobación del plan de desarrollo, Andrés Guerra, excandidato a la Gobernación de Antioquia y quien llegó a la Asamblea gracias al estatuto de la oposición, decidió acompañar a Aníbal Gaviria porque cree que “hoy no es el momento para hacerse el importante, es el momento para ser útiles y eso modifica absolutamente todo el concepto político”. Considera que el plan aborda el 95% de las necesidades de los antioqueños y espera que dé la hoja de ruta para salir de la crisis.


Además, destaca que la Gobernación tuvo en cuenta algunas de sus propuestas de campaña, entre ellas: la conectividad a internet de las escuelas rurales, un programa de bilingüismo gratuito para niños y jóvenes, la creación de la Secretaría de Turismo, los puertos marítimos en el Urabá y los circuitos productivos y rurales para conectar las subregiones.


Por su parte, el diputado Luis Peláez, quien votó en contra de la aprobación del Plan y se declaró en oposición al gobierno, asegura que en él “vamos a encontrar programas muy bonitos, muy bien llamados, con indicadores y presupuestos flojos”.


Para Peláez se debió "Invertir en lo prioritario", por lo que propuso en la discusión del plan de desarrollo cinco temas que, según él, el Departamento no ha solucionado ni les dio la importancia necesaria en la discusión. Estos fueron la alimentación, la salud, los servicios públicos, el empleo en las subregiones y la educación. Para su abordaje sugirió una mejor redistribución de los recursos, pero la Gobernación decidió mantenerlos en los proyectos que, en su concepto, propiciarán la reactivación económica.


Algunos de los programas que el diputado señala por la falta de recursos suficientes son: Maná Plus, la apuesta frente a los habitantes de calle, Vive la cultura en Antioquia, el enfoque étnico —“Está transversal, entonces lo difuminan y no lo ponen claro”, dijo Peláez—, entre otros.


Sin embargo, celebra la apuesta por las ciclorrutas, el bienestar animal, la construcción de dos nuevas cárceles y 75.000 viviendas para el departamento. Además de la inclusión de CALMA, una propuesta suya para la comercialización y distribución de cannabis medicinal, como una línea de dentro de la Fábrica de Licores de Antioquia, que durante los próximos cuatro años estará bajo estudios de prefactibilidad, factibilidad y desarrollo.


Qué pueden esperar los antioqueños del plan de desarrollo


Los expertos concuerdan en que ahora sigue la implementación del Plan “Unidos por la vida 2020-2023” y la priorización de programas y recursos. Eso dependerá de las apuestas para reactivar la economía tras las crisis por la pandemia —una de ellas son las obras de infraestructura— y de las dinámicas políticas propias del departamento.


Asimismo, concuerdan en que lo aprobado refleja el tema de la vida como una de las obsesiones de Aníbal Gaviria en sus diferentes mandatos y que desarrolla de manera integral los elementos para fortalecer la equidad social. El profesor Juan Esteban Lopera resalta que, aunque ha sido recurrente en sus administraciones, el enfoque es “distinto a los que han tenido en otros y este se basa en la ejecución”, porque se centra en la sostenibilidad y el manejo de la pandemia, según explicó.


El diputado Peláez, por su parte, enfatizó en que hará seguimiento a los principales proyectos de infraestructura de la Gobernación como el túnel del Toyo, el Tren del Río y los puertos de Urabá. Sobre los programas y las inversiones estipuladas, dijo que “en unos años vamos a ver los aciertos y desaciertos que tuvo esa apuesta”.


García, en nombre de la administración departamental, subrayó que esperan potenciar el desarrollo de las regiones, para que se traduzca en más oportunidades para los Antioqueños. “Esperamos que el Departamento avance en la construcción de un territorio saludable, donde sus habitantes se sientan seguros, y la paz pueda llegar a cada rincón de Antioquia. Nuestro compromiso es realizar un trabajo constante que integre a todos los equipos de este gobierno, con el objetivo de construir un territorio más incluyente, equitativo y próspero”, finalizó.


Aspectos clave del Plan de Desarrollo, que incluye ideas del programa de gobierno del candidato que obtuvo el segundo lugar en las votaciones. Infografía: Sebastián Carvajal y Andrea Cano.



Publicaciones recientes
Archivo
Buscar por etiqueta
¡Comparte este contenido en tus redes sociales!
bottom of page